Va de Frases: 33 Razones para volver a verte

Hola bloggers de mi corazón.

El día de hoy (24-julio) ha habido un en Vivo con Alice Kellen e Izamari del blog Chaos Angeles, en el quinto día de la Quedada Bloguera Virtual Literaria y ha sido increíble, estuve fangirleando en toda la charla con ella, y contesto la pregunta que le hice *grito de fan loca* así que me dieron tantas ganas que leí las reseñas que hice de sus libros y me di cuenta que no he subido un Va de Frases de sus libros, así que el primero que subiré de ella (porque habrá más) es el de 33 Razones para volver a verte -RESEÑA AQUÍ- el cual fue el primer libro de leí de ella y me encanto, LAS FRASES VAN A SER DE MANERA ALEATORIA, así que vamos a ello:



“No hay pecas suficientes para todos los «te quiero» que siento cada vez que te miro. Treinta y tres sería solo un prólogo; voy a tener que contar las pecas de todo tu cuerpo y así al menos tendremos el principio, el comienzo de todo lo que está por llegar. De todos los infinitos que no voy a poder contar.”

"Y aunque se esforzaba por negarlo, a Mike le gustaban las rarezas."

"—¿Sabes por qué me encantan tus pecas? 
—¿Por qué?—Por qué son como estrellas sobre el lienzo mas bonito del mundo, tu rostro..."

"A falta de pecas de su rostro, se conformaba con volver a contar estrellas, pero si podía elegir..., si podía elegir, siempre la prefería a ella."

"... comprendió entonces que no siempre pudimos ser rescatados, incluso aunque sea evidente que lo necesitamos..."

"...Era imposible no fijarse en ella, no solo porque era la nueva, sino porque tenía un montón de pecas, como si alguien hubiese sacudido una brocha de pintura sobre su piel, salpicándola de estrellas."

"Tampoco se esforzó por hacer nuevos amigos, ya sabia lo duro que era perderlos después. Y al final todo en la vida era un poco así, efímero, temporal, con fecha de caducidad. Era mejor bastarse consigo misma."

"... Pecosa, te quiero de todas maneras posibles que existen. Supe lo que significaba esa palabra gracias a ti... Te quise antes y te quiero ahora. Y lo seguiré haciendo, aunque te vayas... Pero no lo hagas, No te vayas ahora, Rachel. No vuelvas a romper con todo."

"Porque había sentido algo, aunque no tenia claro si era bueno o malo ni con qué palabra definir esa emoción intricada y caótica que apresaba su corazón como una enredadera espinosa y sin flores."

"Notó que algo se encogía en su estomago con brusquedad y se preguntó cómo era posible que enamorarse de alguien provocase una sensación tan dolorosa y desagradable. No sentía maripositas aleteando, demonios; sentía como si una estampida de ñus furiosos se desatase en su interior."

"Me vuelves loco, pecosa. —Apoyó su frente a la de ella—. De verdad que tú eres todo cuanto quiero. Todo cuanto necesito. No busco nada más. Pero no sé cómo hacértelo entender, no sé cómo llegar a ti…"

“Supe lo especial que eras desde el primer día, cuando te vi sentada en esa acera y pensé que tenías el pelo de color calabaza y la piel llena de estrellas como si alguien te hubiese salpicado con una brocha de pintura”.

"Rachel cerró los ojos mientras él apartaba con cuidado los mechones de cabello que caían sobre su rostro y contaba en silencio las pecas que se agolpaban en torno a su nariz. Había treinta y tres. Y eran preciosas."

"No sé si se puede echar de menos algo que nunca has tenido, pero a veces lo siento así. Echo de menos cosas que no llegamos a vivir, momentos que solo han estado en mi cabeza. Y en casi todos esos momentos estás tú Rachel. Echo de menos desayunar antes de ir a la universidad e intentar convencerte para saltarnos  un par de clases y que tú te resistas. Puedo ver la escena. Puedo verte a ti en el campus con la mochila colgada al hombro. Y echo de menos quedarme contigo en la habitación las tardes de tormenta, y risas y caricias y miradas que no han existido."